Un pasajero del vuelo 3385 de US Airways reportó un singular avistamiento sobre los cielos de Carolina del Sur, específicamente en una nube, que posteriormente fue confirmado por los pilotos.
Los avistamientos OVNI realizados en vuelo son considerados dentro de la ovnilogía como unos de los más interesantes y confiables, sobre todo cuando son realizados o confirmados por los propios pilotos, cuya experiencia en el aire deja poco margen a malas interpretaciones o equivocaciones. La semana pasada, el 9 de septiembre, un pasajero del vuelo 3385 de US Airways reportó un singular avistamiento sobre los cielos de Carolina del Sur que posteriormente fue confirmado por los pilotos.
El testigo principal es Gary Miller, un profesional de 60 años, que viajaba desde Washington D.C. a Charleston. A las 10:50 a.m. y a 10 minutos de llegar a su destino, Miller miró por la ventanilla para ver algo que lo dejaría pasmado.
«A 10 minutos de Charleston, y a aproximadamente una altura de 10,000 pies, miré hacia la izquierda del avión y pude observar dos grandes antenas negras elevándose desde un par de nubes. Cada una salía de una nube diferente, estaban estáticas, y parecían elevarse cerca de 500 pies (150 metros) por sobre la parte superior de la nube. Podía ver claramente que debajo de la nube no había ninguna base de tierra desde donde podrían salir, a esa altura era imposible además. Al llegar, esperé que el último pasajero bajara y le pregunté al piloto si había visto esas dos antenas protuberantes saliendo de las nubes a la izquierda del avión y si sabía qué eran.
Su respuesta fue: “Había dos más del lado derecho también y no tenemos idea que eran”.» El piloto no tomó ninguna acción evasiva ante estas «nubes con antenas», y actualmente se está investigando si hubo alguna comunicación con la torre de control respecto al incidente.
Miller aclara que es un pasajero habitual, vuela cerca de una docena de veces por año y nunca había visto algo así.
Unas pocas nubes fueron reportadas sobre el Aeropuerto de Charleston el 9 de septiembre. Las capas nubosas más altas estaban entre los 10,000 y 12,000 pies de altura; aunque las condiciones pudieron ser ligeramente diferentes en la ubicación del avistamiento. El mapa que mostramos a continuación indica la actividad climática sobre el Océano Atlántico.