A pesar de que puede vigilar los datos de Internet y de telefonía de millones de personas, la NSA (Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU.) admitió que carece de tecnología capaz de filtrar cuentas personales de correo electrónico de sus propios empleados, según un nuevo informe. Como suele suceder en este tipo de organismos, solo ejecutan lo que les conviene, y ocultan a toda costa, y hasta de forma absurda lo que no les conviene.
La NSA es una «potencia de supercomputación» con máquinas tan poderosa que su velocidad se mide en miles de billones de operaciones por segundo. El organismo utiliza sus «cerebros» (máquinas gigantes) en la tarea de buscar entre inimaginables cantidades de datos, vigilando esto mediante los programas de captura.
Pero al pedir a la NSA, como parte de una petición de libertad de información, hacer una aparentemente sencilla búsqueda de correo electrónico de sus propios empleados, la agencia dice que no cuenta con la tecnología para realizar esto.
«No hay método central para buscar un correo electrónico en este momento con la forma en que nuestros registros están configurados, por desgracia,» indicó la representante de la NSA Cindy Blacker. El sistema es «un poco anticuado y arcaico», agregó.
Justin Elliot, reportero de Pro Publica, corporación estadounidense de periodismo de investigación, mandó una solicitud a la NSA, de acuerdo con la Ley por la Libertad de la Información de EE.UU. (FOIA, por sus siglas en inglés). La solicitud consistía en buscar información de correos electrónicos de los Empleados de la National Geografic, con el objetivo de comprender mejor los esfuerzos de relaciones públicas de la agencia.
Pocos días después de presentar la solicitud, Cindy Blacker llamó, pidiéndome que redujera mi solicitud ya que la oficina FOIA puede buscar mensajes de correo electrónico sólo «persona a persona», y no de forma masiva. La NSA tiene más de 30.000 empleados.
Me acerqué a la oficina de prensa NSA en busca de más información, pero no obtuve respuesta.
De hecho, es común que las grandes corporaciones hagan búsquedas masivas en los correos electrónicos de sus empleados como parte de las investigaciones internas o de descubrimiento legal.
«Es incomprensible», dice Mark Caramanica del Comité de Reporteros para la Libertad de Prensa.» Esta es una agencia que se encarga de vigilar a millones de comunicaciones a nivel mundial y es inconcebible que ni siquiera puedan seguir sus propias comunicaciones internas en respuesta a una solicitud de FOIA».
Fuente: [propublica.org]