La nave espacial no tripulada MAVEN ha entrado con éxito en la órbita de Marte, tras un viaje de 10 meses y más de 700 millones de kilómetros. Pronto podrá comenzar su trabajo de estudiar la atmósfera del planeta rojo, uno de los pasos previos para una futura misión tripulada.
La NASA ha confirmado que la sonda Maven completó con éxito el proceso de frenado con sus seis retrocohetes, que durante 33 minutos frenaron el satélite hasta que quedó atrapado por la gravedad de Marte en la órbita adecuada.
El objetivo de MAVEN (Mars Atmosphere and Volatile Evolution, Evolución de la Atmósfera y Volátiles en Marte), es determinar qué fue lo que hizo que Marte perdiera la mayor parte de su atmósfera y su agua, además de estudiar su estado actual recopilando datos sobre su composición o el ritmo al que el planeta pierde ciertos gases en el espacio, debido a que no tiene la protección de un campo electromagnético como la Tierra.
Misión de un año
Los científicos podrán conocer si Marte, como se cree, era un planeta repleto de océanos que fue perdiendo agua por la acción constante de los vientos solares y la carencia de un campo electromagnético.
La sonda Maven ayudará a conocer mejor las capas altas de la atmósfera marciana, cómo funciona la ionosfera del planeta y el efecto que tiene el viento solar. Partió en noviembre de 2013 desde Cabo Cañaveral (Florida, EE. UU.) hacia el planeta rojo.
La primera misión con la que se probarán los instrumentos de la sonda será el paso del cometa Siding Spring cerca de Marte el próximo mes, un evento estelar no previsto inicialmente por los responsables de la misión.
Esta coincidencia permitirá conocer cómo afecta a la atmósfera de un planeta el paso de un cometa tan cerca como lo hará Siding Spring, que pasará a menos de 70.000 kilómetros de Marte.
La nave espacial no tripulada está programada para orbitar durante un año solar terrestre, a una altitud de entre 150 kilómetros y 125 kilómetros sobre la superficie marciana.
Futura misión tripulada
El estudio de la atmósfera y el clima de Marte también será útil para preparar en el futuro una misión tripulada al planeta rojo.
La sonda Maven, la primera que se envía para tomar lectura de las capas externas de Marte, es fruto de un proyecto conjunto de la NASA con Lockheed Martin, la Universidad de Colorado y la Universidad de California.