Astrónomos de la NASA del equipo del telescopio espacial Hubble informaron este jueves que pueden predecir con certeza que la vía Lactea se enfrenta a una colisión frontal con nuestra vecina galaxia Andrómeda, y esto ocurrirá en 4 mil millones de años a partir de ahora.
“El próximo evento cósmico importante que afectará a nuestra galaxia, el sol, y el sistema solar es la colisión titánica de nuestra galaxia, la Vía Láctea con la vecina galaxia de Andrómeda [M31]”, destaca el informe publicado ayer por la NASA sobre los hallazgos de Roeland van der Marel del Space Telescope Science Institute (STScI) en Baltimore.
Para agravar la compleja situación, la pequeña galaxia Triángulo, también llamada M33, se unirá al choque y quizás se funda a Andrómeda. “Hay una pequeña posibilidad de que M33 llegará en primer lugar”, agrega el estudio.
En un análisis de cómo ocurrirá esta colisión los expertos creen que el Sol se trasladará a una nueva región en nuestra galaxia, pero es posible que la Tierra y el Sistema Solar no corran el peligro de ser destruidos.
Andrómeda se encuentra a 2,5 millones de años luz de distancia y “está cayendo inexorablemente hacia la Vía Lactea en una atracción de la gravedad mutua entre las dos galaxias y la materia oscura que rodea a las dos”, según el estudio.
“Después de casi un siglo de especulaciones sobre el destino futuro de Andrómeda y nuestra Vía Láctea, al fin tenemos una idea clara de cómo se desenvolverán los acontecimientos en los próximos miles de millones de años”, explica Tony Sohn Sangmo de STSc.
Los investigadores estiman que la velocidad en que Andrómeda se acerca a la Vía Lactea es 2 mil veces más rápida, pero aún así tardará aun unos 4 mil millones de años. En este sentido la NASA aclara que hace tiempo se conoce que Andrómeda se mueve a 250 mil millas /h. Eso es lo suficientemente rápido para viajar de aquí a la luna en una hora.
La explicación es que el Universo está en su fase de expansión y aceleración por lo que ocurren las colisiones y según las investigaciones de Hubble, “este tipo de encuentros eran comunes en el pasado, cuando el Universo era más pequeño”.
Desde hace más de un siglo que los astrónomos tratan de medir el movimiento de Andrómeda hacia los lados y solo ahora el equipo del Telescopio Espacial Hubble, dela Agencia Espacial Europea ESA y de la NASA, dirigidos por Roeland Van der Marel realizó estas observaciones descritas como “extraordinariamente precisas del movimiento lateral de la M31[Andrómeda] que disipa cualquier duda de que está destinado a colisionar y fusionarse con la Vía Láctea”.
Este registro se logró observar repetidamente en determinadas regiones de la galaxia por cinco a siete años, dijo Jay Anderson, de STScI.
En la simulación efectuada con estos resultados, el peor caso de escenario es que Andrómeda choca contra la Vía Láctea de frente, y las estrellas son esparcidas en diferentes órbitas, informa Gurtina Besla de la Universidad de Columbia en Nueva York, NY, según Hubble.
“Las poblaciones estelares de ambas galaxias se empujarían, y la Vía Láctea pierden su forma aplanada de panqueque quedando con la mayoría de las estrellas en órbitas casi circulares. Los núcleos de las galaxias se fusionan, y las estrellas establecen órbitas aleatorias para crear una galaxia de forma elíptica “. describe Gurtina Besla.
Fuente: [Lagranepoca.com]