Todos podemos ser marcianos.
Existe evidencia de que la vida terrestre se originó en Marte y fue traída a este planeta a bordo de un meteorito, dijo el bioquímico Steven Benner.
Existe evidencia de que la vida terrestre se originó en Marte y fue traída a este planeta a bordo de un meteorito, dijo el bioquímico Steven Benner, del Instituto Westheimer para Ciencia y Tecnología en Florida.
Una forma oxidada del elemento molibdeno, puede haber sido crucial para el origen de la vida, probablemente disponible en la superficie del Planeta Rojo hace mucho tiempo, y no disponible hoy en la Tierra, dijo Benner, quien presentó sus hallazgos este 28 de agosto (2013) en la conferencia anual de la geoquímica Goldschmidt en Florencia, Italia.
«Sólo cuando se convierte en molibdeno muy oxidado es capaz de influir formando vida temprana», dijo Benner en un comunicado. «Esta forma de molibdeno no podría haber estado disponible en la Tierra en el tiempo en que la vida comenzó, porque hace 3 millones de años, la superficie de la Tierra tenía muy poco oxígeno, pero Marte si tenía las condiciones propicias para que se origine la vida. Esta es otra pieza más de evidencia que hace más probable que la vida haya llegado a la Tierra en un meteorito marciano, en lugar de empezar en este planeta».
Los compuestos orgánicos son los componentes básicos de la vida, pero que necesitan un poco de ayuda para que las cosas sucedan. Simplemente añadiendo energía como el calor o la luz se vuelve una sopa de moléculas orgánicas en una sustancia parecida al alquitrán, dijo Benner.
Ahí es donde entra a tallar el molibdeno oxidado o boro, otro de los elementos, que en la mezcla ayudaría a dar el salto a la vida, añade Benner.
«El análisis de un meteorito marciano mostró recientemente que había boro en Marte, ahora creemos que la forma oxidada del molibdeno también estaba allí», dijo.
Otro punto a favor de Marte es la probabilidad de que la Tierra primitiva estaba completamente cubierta por el agua, mientras que el antiguo planeta rojo tuvo importantes zonas secas, dijo Benner. Todo este líquido habría hecho difícil la presencia del boro, que se encuentra actualmente sólo en lugares extremadamente secos, por lo que no se hubiera podido formar en concentraciones suficientemente altas en la Tierra cuando la vida estaba evolucionando.
Además, añade Benner, el agua es corrosiva para el ARN, que la mayoría de los investigadores creen que fue la primera molécula genética (en lugar de ADN, lo que vino después).
No han sido descubierto hasta la fecha organismos vivos en el Planeta Rojo, pero es posible que la vida en Marte – si alguna vez existió – pudo haber hecho su camino a la Tierra en algún momento, muchos científicos lo dicen.
Algunos microbios son increíblemente resistentes, después de todo, y pueden ser capaces de sobrevivir a un viaje interplanetario después de haber sido arrancados de su mundo por un impacto de un asteroide. La dinámica orbital muestra que es mucho más fácil para las rocas viajar de Marte a la Tierra que al revés.
Dondequiera que se haya originado la vida terrestre, Benner se alegra de que echó raíces en nuestro planeta azul.
«Es una suerte que terminamos aquí, sin embargo, tan ciertamente la Tierra ha sido el mejor de los dos planetas para mantener la vida», dijo Benner. «Si nuestros ancestros, hipotéticos marcianos, habían permanecido en Marte, podría no haber sido una historia que contar.»
Las declaraciones del bioquímico Steven Benner tiene sólidas bases, me refiero a la Panspermia.
Teoría de la Panspermia
Se denomina Panspermia a la hipótesis que sugiere que las Bacterias o la esencia de la vida prevalecen diseminadas por todo el universo y que la vida comenzó en la Tierra gracias a la llegada de tales bacterias a nuestro planeta. Es decir, que el origen de la vida en la Tierra es extraterrestre.
¿Cúando se elaboró esta teoría?
Puede decirse que los orígenes de esta teoría se remontan a algunas de las consideraciones del filósofo griego Anaxágoras (500 – 428 A.C.).
Luego, el término fue acuñado por el biólogo alemán Hermann Ritcher en 1865. fred Hoyle, un importante astrónomo, también apoyó dicha hipótesis. En 1903, el químico y ganador del Premio Nobel, Svante Arrhenius popularizó el concepto de la vida originándose en es espacio.
Pros y contras
Existen estudios que sugieren la posible existencia de bacterias capaces de sobrevivir largos períodos de tiempo incluso en el espacio exterior, lo que apoyaría el mecanismo subyacente de este proceso. Estudios recientes en la India apoyan la hipótesis. Otros han hallado bacterias en la atmósfera a altitudes de más de 40 km donde, aunque no se espera que se produzcan mezclas con capas inferiores, pueden haber llegado desde éstas.
Bacterias Streptococcus mitis que fueron llevadas a la Luna por accidente en la Surveyor 3 en 1967, pudieron ser revividas sin dificultad cuando llegaron de vuelta a la Tierra tres años después.
El mayor inconveniente de esta teoría es que no resuelve el problema inicial de cómo surgió la vida, sino que se limita a mover la responsabilidad del origen a otro lugar. Otra objeción a la panspermia es que las bacterias no sobrevivirían a las altísimas temperaturas y las fuerzas involucradas en un impacto contra la Tierra, aunque no se ha llegado aún a posiciones concluyentes en este punto (ni a favor ni en contra), pues se conocen algunas especies de bacterias extremófilas capaces de soportar condiciones de radiación, temperatura y presión extremas que hacen pensar que la vida pudiera adquirir formas insospechadamente resistentes.
El análisis del meteorito ALH84001, generalmente considerado como originado en el planeta Marte, sugiere que contiene estructuras que podrían haber sido causadas por formas de vida microscópica. Esta es hasta la fecha la única indicación de vida extraterrestre y aún es muy controvertida. Por otro lado, existe el meteorito Murchison, que contiene uracilo y xantina, dos precursores de las moléculas que configuran el ARN y el ADN.
Fuente: [space.com]