El director de este departamento de la FAP explicó a elcomercio.pe más detalles sobre los procesos y alcances de la reactivada entidad.
El pasado 18 de octubre, la Fuerza Aérea del Perú (FAP) reactivó una oficina destinada a investigar el avistamiento de objetos voladores no identificados (ovnis), la cual fue creada el 2001 pero dejó de funcionar cuatro años después. Es decir, ahora el Estado peruano tiene nuevamente de forma oficial una entidad que se encargue de responder con coherencia -y tras un proceso de investigación- a las incógnitas sobre los citados fenómenos en el espacio aéreo nacional.
Se trata del Departamento de Investigación de Fenómenos Aéreos Anómalos (Difaa), el cual buscará también crear un mapa de fenómenos aéreos extraños de acuerdo a una clasificación. Se aprovecha además que actualmente –gracias a la tecnología de filmadoras y teléfonos celulares- es más fácil que las personas registren los avistamientos y los compartan.
En diálogo con elcomercio.pe, el director de la Difaa, coronel Julio Vucetich, criticó a quienes se mofan del tema restándole seriedad y destacó que el departamento podrá realizar trabajos conjuntos con entidades similares de otros países con el fin de que en el Perú exista información corroborada. Para esto, también se realizan coordinaciones con universidades, instituciones públicas y privadas para patrocinar las investigaciones.
“De acuerdo a un informe realizado por Francia, de un 100% de avistamientos o reportes presentados, se ha podido verificar que solamente el 5% sí es presencia extraterrestre”, detalló el coronel, quien dijo tener conocimiento de recientes casos en Huánuco y La Molina, aunque aún no recibe información.
“HUBO UN INCREMENTO MUNDIAL DE AVISTAMIENTOS”
¿A qué se considera un fenómeno aéreo anómalo?
Es todo aquello que se ve en el espacio aéreo y que puede no realizar una acción normal, que su movimiento no está dentro de los estándares establecidos. Están considerados objetos voladores no identificados (Ovnis), meteoritos y todo lo relacionado a basura espacial, sondas o satélites que han cumplido su ciclo de vida en el espacio, no han sido retiradas y caen dentro de la órbita terrestre. Por el calor se van desintegrando y eso puede contaminar el ambiente.
Tengo entendido que el departamento estuvo desactivado, ¿por qué se decidió reabrirlo?
La apertura de este departamento ha sido principalmente, porque yo tomé la Dirección de Intereses Aéreos Espaciales (Dinae) aquí. Y por las diferentes reuniones de jefes de estados mayores a nivel Sudamérica para poder intercambiar experiencias y ocurrencias en esta materia.
¿Y por qué permaneció inactivo durante años?
Me parece que no se le dio la importancia, los que estaban en ese momento no hicieron las acciones correspondientes y el alto mando pensó que no era necesario. De ese tiempo a ahora ha habido un incremento, podría decirse a nivel mundial, de avistamientos.
¿Cómo es el proceso de investigación?
Tenemos un consejo consultivo formado por diferentes especialistas y por personal de la Fuerza Aérea en actividad. Es un equipo mixto que trabajará una ocurrencia. Hay que analizar si fue realmente avistado o si fue producto de una actividad autorizada o no en la parte aérea.
¿Con cuántas personas en total cuenta el departamento?
Tenemos un solo concejo consultivo conformado por ocho personas más tres militares. Somos once. Dependiendo de lo que haya pasado, todos entran en evaluación de la información, recopilación, entrevistas, visitas al lugar. Contamos con un astrónomo, arqueólogo, sociólogo, museólogo, abogado, periodista. El estudio será conjunto aquí, pero para recolección de información nombraremos dos a tres personas.
¿Cuentan con los equipos necesarios, la tecnología?
Los especialistas que son ‘ad honorem’ por el momento, cuentan con equipos para hacer evaluaciones iniciales. Si requiriésemos que alguien nos apoye, el tener una oficina montada y que sea representativa del Perú -a nivel gobierno- hace que el tema sea más serio.
¿Cuentan con data de años anteriores?
Tenemos información histórica, se está haciendo un tomo del año 1957 a 1990 y estamos avanzando de 1990 para adelante. Son informaciones de fuente abierta de periódicos. (Sobre) lo anterior, desde el año 2001, hubo un robo de tres computadoras en otra sede, en donde estaba la información de lo estudiado. Creo que por ahí también fue el tema de cerrar el departamento.
¿Hasta el momento ya han recibido algún tipo de información?
Me ha llamado por teléfono un señor de Estados Unidos de algo que le pasó a él el año 90 en Perú, nos iba a mandar la información correspondiente para que lo tengamos en cuenta si pasa algo parecido.
¿En qué países de la región hay departamentos similares?
Por ejemplo, en Chile tienen el Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos (Cefaa), la Comisión de Estudios del Fenómeno Ovni (Cefora) en Argentina, la Comisión Receptora e Investigadora de Denuncias de Objetos Voladores No Identificados (Cridovni) de Uruguay. Nos vamos a ir interconectando en reuniones bilaterales para poder intercambiar información y tener reuniones de coordinación. Los más avanzados son los europeos, Francia, Italia y España.
¿CÓMO INFORMAR SOBRE AVISTAMIENTOS?
Las personas que hayan avistado algún objeto volador no identificado pueden comunicarse con el Departamento de Investigación de Fenómenos Aéreos Anómalos (DIFAA) al teléfono 4461737 o escribir a la dirección [email protected].
La Dirección de Intereses Aéreos Espaciales (Dinae) cuenta también con la página web www.dinae.fap.mil.pe. Las oficinas se ubican en la avenida Dos de Mayo 161, en el distrito limeño de Miraflores.
Fuente: [El Comercio] – Autor: René Zubieta