Científicos de la Universidad de Nottingham desarrollan el NOTT-300, con un coste de producción muy bajo

 

NOTT-300NOTT-300. Fuente: Universidad de Nottingham.

 

Científicos de la Universidad de Nottingham, en el Reino Unido, han desarrollado un novedoso material poroso (un compuesto basado en nitrato de aluminio, materiales orgánicos y agua) que, utilizado con técnicas sofisticadas, podría ser útil en la lucha contra el calentamiento global.

 

El Consejo Europeo de Investigación (CEI) financió parte de este estudio con una subvención avanzada (Advanced Grant) de 2,5 millones de euros concedida al profesor Martin Schröder para realizar el proyecto Coordspace (“Espacio de la química de la coordinación: extracción, almacenamiento, activación y catálisis”).

 

Los fondos proceden del Séptimo Programa Marco (7PM) de la UE. Los resultados, presentados recientemente en la revista Nature Chemistry, demuestran que este material, denominado NOTT-300, podría ser una alternativa a las técnicas de absorción de dióxido de carbono (CO2).

 

“Nuestro nuevo material podría utilizarse para capturar compuestos de carbono mediante diversas técnicas y reducir las emisiones de CO2, contribuyendo así a la disminución de los gases de efecto invernadero en la atmósfera”, ha explicado el investigador jefe, el profesor Martin Schröder de la Universidad de Nottingham.

 

“Ofrece la posibilidad de desarrollar un sistema de captación de fácil «quita y pon» que conlleve menos contrapartidas económicas y medioambientales que las tecnologías existentes. Otra de sus aplicaciones sería la separación de gases cuando se desee extraer CO2 o gases ácidos como el SO2 (dióxido de azufre)”, afirma Schröder.

 

Un material barato

Según los investigadores, estos hallazgos pueden ayudar a resolver el problema de los gases de efecto invernadero. “Es bien sabido que existe la imperiosa necesidad de eliminar la huella de CO2 dejada por la actividad humana para mitigar los efectos negativos que ejerce sobre el cambio climático mundial”, señala el investigador.

 

“Hay motivos muy poderosos para desarrollar estrategias eficaces para eliminar el CO2 utilizando materiales alternativos con alta capacidad de adsorción, alta selectividad hacia el CO2 y alta capacidad de regeneración, todo a un coste viable”, concluye.

 

Los científicos piensan que el NOTT-300 reúne estas características, por lo que podría favorecer la sostenibilidad química y medioambiental. En relación al coste, este material se sintetiza a partir de sustancias orgánicas relativamente simples y baratas. El único disolvente es el agua.

 

Capta casi todo el CO2 que lo atraviesa

“El material presenta una elevada absorción de CO2 y SO2”, comenta el investigador de Nottingham. En cuanto al CO2, es capaz de atrapar en su porosa estructura hasta el noventa por ciento del dióxido de carbono que lo atraviesa.

 

En lo que se refiere al SO2, constituye el material con mayor absorción que se haya documentado hasta ahora. Además, es selectivo para ambos gases, mientras que la adsorción de otros gases como el hidrógeno, el metano, el nitrógeno y el oxígeno es muy baja o nula, según Schröder.

 

El equipo observó también que el material facilita la liberación de las moléculas de gas absorbidas en condiciones de presión reducida y que presenta una alta estabilidad química frente a los disolventes orgánicos más frecuentes. NOTT-300 es asimismo estable en agua y resistente a temperaturas de hasta 400 ºC.

 

En este estudio colaboraron investigadores del Consejo de Instalaciones de Ciencia y Tecnología (STFC) y del Diamond Light Source del Reino Unido y de la Universidad de Pekín, China.

 

Fuente: [Tendencias 21]